Los incendios forestales son un peligro para todos.
Los incendios forestales tienen un gran poder destructivo ya que pueden avanzar a una velocidad de hasta 23 kilómetros por hora incendiando y consumiendo todo lo que encuentran a su paso.
Por un lado, destruyen grandes terrenos de bosques y por ende de vida vegetal, así como infraestructura urbana cuando colindan con asentamientos humanos
El inicio y desarrollo de un incendio forestal depende en parte del clima, de la topografía, la forma del combustible y el nivel de humedad de éste. Mientras mayor cantidad de combustible exista en un área, más intenso será el fuego.
Para que un incendio se produzca, son necesarios: un combustible, es decir cualquier material inflamable, que normalmente es la vegetación seca, oxígeno del aire y una fuente de calor. La mayoría de los incendios forestales se deben al descuido y a la irresponsabilidad humana.
Para evitar incendios forestales te compartimos las siguientes recomendaciones:
• No arrojes cerillos o cigarros encendidos en la carretera y menos en medio del bosque.
• No tires basura, las botellas o vidrios pueden iniciar el fuego creando el efecto lupa con los rayos del sol.
• No dejar nada inflamable después de acampar.
• No prender fuego en los terrenos
• Apaga el fuego de inmediato si ves el inicio de un incendio o cércalo con ramas verdes o bien arrójale agua o tierra.
• Pida ayuda de inmediato si el fuego se sale de control, ponte a salvo y avisa a las autoridades lo más pronto posible.
• Resguarda tu vida, al huir del incendio no lo hagas ladera arriba, busca áreas planas y camina en sentido contrario al viento.
• En prácticas agrícolas, si usas fuego para limpiar el terreno que se va a sembrar, has una brecha guardarraya para que no se propague el fuego.
Cuidemos Nuestros Bosques y selvas.
Información tomada de https://www.geoenciclopedia.com/incendio-forestal/