Cómo empezar, cómo decirte que nuestros hábitos se han deteriorado, que estamos dando mal ejemplo, que educamos mal a nuestra descendencia… que no es normal comprar a los niños alimentos chatarra, como son chicharrón de harina, Sabritas, totis o cualquier fritura, que no los alimenta sólo los engorda y no los alimenta, por el contrario, los está envenenando, porque el conservador que le ponen ara que no se arrancien no es otra cosa que veneno, sí, veneno que sus cuerpos no eliminan, y que se les va acumulando en cada consumo.
Que los refrescos ya no tienen azúcar, que también ya no es sana, sino edulcorantes como el aspartame, que el cuerpo tampoco elimina, pero sí lo intoxica.
Además todos esto productos generan una increíble cantidad de basura.
Hagamos conciencia: Estamos haciendo mucho daño a los niños y a nuestra madre tierra.
Hagamos esfuerzos, volvamos a los alimentos y bebidas naturales.
La naturaleza y nuestra descendencia bien valen la pena.