Cada primero de enero, los cubanos celebran un aniversario más del triunfo de la Revolución, victoria que significó, no solo el derrocamiento del régimen tiránico que oprimía a Cuba, sino además la culminación de las aspiraciones de independencia y de emancipación social por las cuales habían derramado su sangre, cientos de miles de cubanos, durante casi un siglo de lucha.