“Y llegaron los 200 programas nomás. Así, el programa doscientos. Como quien no quiere la cosa. Como quien moviliza, promueve y se acostumbra a una cosa. Aquí nos hemos acostumbrado a estar: miércoles tras miércoles. Religiosamente al pie del cañón, confiando en que vos, en que ustedes están del otro lado. En que estás del otro lado. Prendiendo la radio ya por costumbre. O alertada por algún mensajito. O preparado con los mates o el té de la mañana, para reflexionar sobre los temas más complejos, para sonreirte de las zonzeras que hablamos, para levantar el ánimo (y el cuerpo) cada miércoles a la mañana. Mañanas pegajosas. Mañanas de lluvia. Mañanas de sol. “Una mañana, un nuevo sol, un nuevo día, día de vos.” Un par veces, por lo menos, hemos arrancado con esa musiquita de la Mona. Simplemente porque el día estaba extraordinario. Y a pesar de las pálidas. La vida nos regalaba un diazón. Así, como el de hoy. Con el cielo: celeste! Como el corazón de este barrio y el de esa bandera que varias y varios identificamos con nuestro territorio, nuestras esperanzas y nuestros sueños. Y ahí estás, y acá estamos. Escuchando lo que decimos. Coincidiendo. No acordando. Pero siempre eso sí: empatizando. Porque la radio, y todo lo que hacemos cada vez que se abre el micrófono en estos miércoles a la mañana desde hace 4 años. Es para saber que a pesar de la distancia. A pesar de no vernos. Estamos, en nuestras cotidianeidades. En nuestras luchas. En nuestros anhelos. En nuestras broncas y angustias. Y que a todo eso lo mezclamos con la convicción de que aquí estaremos. Para llenar de sonido, ideas y música a vuestros oídos. Y de memoria identidad y lucha vuestros corazones. Hoy no hablaremos de gentrificación, de seguridad, de planificación urbana, de cloacas y centros vecinales. De atropellos estatales y dignidades barriales. O sí! Sí que vamos a hablar. Entre los festejos y la algarabía de encontrarnos un programa más. En este númer redondo del 200. Para hablar nuevamente de lo que nos perturba y molesta. De lo que nos moviliza. De lo que nos convierte en esto que somos. Partecitas, retazos, luces que se encuentran en la radio y en el territorio. Para seguir construyendo (a pesar de los tropezones) los horizontes que queremos, anhelamos y reproducimos en nuestros corazones y en estos mismos territorios. Es un programa más… y no lo es. El programa 200 de La Chimenea. Ese que hacemos todas y todos. Las y los que hablamos y lo producimos. Y las y los que lo escuchan y quienes vuelven trascendente al mensaje. Porque de eso se trata: de comunicarnos para encontrar las guías, los mapas, los horizontes que permitan encontrarnos en la calle y en el barrio. Gracias por estar. Y por ser quienes le dan sentido a este semanario radial de la lucha barrial. Gracias: porque sin vuestra empatía. Ningún programa, canción, ni noticia tiene sentido ni valía. Desde Defendamos Alberdi, seguiremos haciendo sonar esta Chimenea. Hasta que el barrio, sea el territorio que queremos y por el cual luchamos: semana a semana. Y día a día. ” -Celebramos los 200 programas de La Chimenea, con mensajes, voces diversas y sorpresas. Recordamos momentos, vivencias y antiguos recuerdos de casi 4 años de semanas radiales. - Entrevistamos a Federico Kopta (biólogo). Para informarnos sobre la situación de la llamada Autovía de Montaña y sus formas de construcción. Profunda y fundamental reflexión sobre varios aspectos peligrosos y negligentes de la megaobra. ¿Por qué importantes sectores de la población están en contra de esta obra de infraestructura? Kopta: “No se está en contra de que se haga una autovía. Lo que se está en contra es que se haga la autovía por el faldeo de la montaña.” - Rememoramos la entrañable peña celebrada el domingo 20 en el Centro Vecinal Alto Alberdi. Y el placer de ser parte una gran congregación de vecinas y vecinos en el predio del ex Club Tigre. - Informamos y contamos detalles de nuestra lista Paren de Demoler Alberdi / Defendamos Alberdi. Y continuamos analizando el proceso eleccionario del centro vecinal de Alberdi.