LOCUTORA —¡Ultima hora! Noticias procedentes de Cajamarca indican que el Inca Atahualpa está ya a punto de ser liberado por sus secuestradores. En efecto, cumplido el plazo y pagado el rescate, el capitán español Francisco Pizarro, responsable del secuestro, va a poner en libertad al conocido dirigente indígena. Ampliamos la información desde el mismo lugar de los hechos. ¡Buenos días, Perú!
REPORTERO —Y buenos días a todos nuestros oyentes que esperan con impaciencia el feliz desenlace de esta pesadilla que se prolonga desde hace siete mes. Como ya ustedes saben, el pasado 16 de noviembre fue capturado el máximo dirigente del pueblo inca en un sorpresivo y sangriento ataque ocurrido aquí, en esta ciudad de Cajamarca.
Los conquistadores españoles secuestraron al jefe indígena y desde entonces lo mantienen prisionero. Para liberarlo, exigieron una cifra exorbitante: una habitación entera llena de oro y dos habitaciones llenas de plata. Pactadas estas condiciones, comenzaron a llegar a Cajamarca por las cuatro rutas del imperio, largas caravanas de llamas y de indígenas cargados con piezas de oro, jarras ceremoniales, joyas de un inmenso valor artístico... todos los tesoros se fueron amontonando en las habitaciones señaladas. Para que ustedes, amigos oyentes, se hagan una idea de la fabulosa riqueza que esto representa, les diremos que sólo la habitación de oro que hoy ya se encuentra totalmente colmada mide 17 pies de ancho por 22 de largo. También disponemos de cifras exactas sobre la cantidad de oro acumulada durante estos meses de secuestro: nada menos que un millón 326 mil escudos de oro puro. ¡Sólo en oro, un millón 326 mil escudos! Ahora el largo cautiverio del inca va llegando a su fin. Aunque el precio del rescate ha sido desmesurado, los familiares de Atahualpa y sus simpatizantes están llenos de alegría, ansiosos por ver nuevamente a su dirigente sano y salvo. De un momento a otro, el capitán Pizarro cumplirá su promesa y pondrá en libertad al prisionero... ¡Atención...!
Ya sale el capitán Pizarro... Atahualpa, a su lado, el rostro sereno, aunque con claras señales de cansancio... El capitán español se adelanta. Va a hablar...
PIZARRO —Ya tenemos el oro. ¡Ahora, mátenlo!
INTERLOCUTOR —Y así fue. En 1533, el inca Atahualpa, el Hijo del Sol, fue asesinado por Pizarro, a pesar de haber pagado el pecio de su rescate. Lo mataron calculadamente un 24 de junio, cuando su pueblo se preparaba para celebrar la fiesta grande del Sol.
Desde hace 500 años hay mucha sangre por rescatar. Tal vez la historia esté al revés.