EXCLUSIVA NACIONAL (SERVICIO DE ACN RADIO)
FECHA: 18-04-19
REDACTOR: Elizabeth Reyes Tases-Tomás Noda
SONIDO: TEMA DE PRESENTACION
LOC: De Céspedes a Fidel, una sola Revolución.
Eusebio Leal Spengler, historiador de la ciudad de La Habana, resaltó en Bayamo los múltiples paralelismos que demuestran la existencia de una sola Revolución en Cuba, de Carlos Manuel de Céspedes a Fidel Castro, en ocasión de conmemorarse el bicentenario del natalicio del Padre de la Patria.
Insistentemente, a lo largo de su vida como hombre de ley, intelectual, político y jefe militar, el ilustre bayamés dio lecciones basadas siempre en el principio de que nosotros podemos, y lo que hagamos desde ser con nuestro propio esfuerzo, sentenció.
A 200 años de su natalicio -dijo- ese pensamiento de Céspedes tiene plena vigencia, cuando desde Estados Unidos los enemigos de la Revolución insisten en agredirla, y en el 60 aniversario de la victoria de Playa Girón, aún sienten el punzante calor de la herida, e intentan convertir la derrota en celebración.
Desde el líder del alzamiento del 10 de octubre hasta Fidel, sorprende la vocación por la erudición, la que ambos consideraron fundamental para enfrentar el desafío de su tiempo, recalcó Leal Spengler.
Señaló además que los dos fueron profundos conocedores de la ley, el derecho romano, los clásicos de la antigüedad y el pensamiento revolucionario, así como partidarios de librar la gran batalla por la emancipación.
La impronta del Padre de la Patria estableció igualmente una regularidad en la lucha del pueblo cubano, la de arrebatar las armas al propio enemigo, cuya efectividad se demostró luego en la lucha de los rebeldes en la Sierra Maestra, declaró.
Frente a su casa, y desde el Bayamo que tanto amo, Leal Spengler resaltó que en ningún momento de la historia fue posible opacar la gloria inmortal del fundador del Ejército Libertador de Cuba, el primer mambí, el creador del periódico El Cubano Libre y Hombre de Mármol, como lo llamó José Martí.
De la plenitud del poder, el bastón carey con puño de oro, y el carácter altivo del señor de hombres, el patricio transitó por destierros, extraordinarios obstáculos, desprendimientos y sacrificios, todo en aras de la unidad de la nación.
El eminente intelectual afirmó que Cuba reconocido absolutamente la importancia de Céspedes como el iniciador, partidario además de la separación del estado y la iglesia, el matrimonio civil y las instituciones republicanas.
Un hombre -destacó- que creyó en la educación y en la necesidad de la cultura, porque las revoluciones, como afirmó quien fuera su ferviente seguidor, Fidel Castro, solo pueden ser hijas de las ideas y la cultura.
Leal Spengler participó anoche como orador en la velada político-cultural por el bicentenario del natalicio de Carlos Manuel de Céspedes, la cual tuvo lugar frente al museo ubicado en la casa natal del prócer, en la Plaza de la Revolución, de Bayamo.
Presidieron la emotiva actividad el Primer Vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Salvador Valdés Mesa; Víctor Gaute, Miembro del Secretariado del Comité Central del Partido Comunista de Cuba; Alpidio Alonso, Ministro de Cultura; y las principales autoridades políticas y gubernamentales de la oriental provincia de Granma
ACN RADIO
Audio disponible en esta dirección: https://radioteca.net/userprofile/ain_cuba/
FECHA: 18-04-19
REDACTOR: Elizabeth Reyes Tases-Tomás Noda
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LOC: De Céspedes a Fidel, una sola Revolución.
Eusebio Leal Spengler, historiador de la ciudad de La Habana, resaltó en Bayamo los múltiples paralelismos que demuestran la existencia de una sola Revolución en Cuba, de Carlos Manuel de Céspedes a Fidel Castro, en ocasión de conmemorarse el bicentenario del natalicio del Padre de la Patria.
Insistentemente, a lo largo de su vida como hombre de ley, intelectual, político y jefe militar, el ilustre bayamés dio lecciones basadas siempre en el principio de que nosotros podemos, y lo que hagamos desde ser con nuestro propio esfuerzo, sentenció.
A 200 años de su natalicio -dijo- ese pensamiento de Céspedes tiene plena vigencia, cuando desde Estados Unidos los enemigos de la Revolución insisten en agredirla, y en el 60 aniversario de la victoria de Playa Girón, aún sienten el punzante calor de la herida, e intentan convertir la derrota en celebración.
Desde el líder del alzamiento del 10 de octubre hasta Fidel, sorprende la vocación por la erudición, la que ambos consideraron fundamental para enfrentar el desafío de su tiempo, recalcó Leal Spengler.
Señaló además que los dos fueron profundos conocedores de la ley, el derecho romano, los clásicos de la antigüedad y el pensamiento revolucionario, así como partidarios de librar la gran batalla por la emancipación.
La impronta del Padre de la Patria estableció igualmente una regularidad en la lucha del pueblo cubano, la de arrebatar las armas al propio enemigo, cuya efectividad se demostró luego en la lucha de los rebeldes en la Sierra Maestra, declaró.
Frente a su casa, y desde el Bayamo que tanto amo, Leal Spengler resaltó que en ningún momento de la historia fue posible opacar la gloria inmortal del fundador del Ejército Libertador de Cuba, el primer mambí, el creador del periódico El Cubano Libre y Hombre de Mármol, como lo llamó José Martí.
De la plenitud del poder, el bastón carey con puño de oro, y el carácter altivo del señor de hombres, el patricio transitó por destierros, extraordinarios obstáculos, desprendimientos y sacrificios, todo en aras de la unidad de la nación.
El eminente intelectual afirmó que Cuba reconocido absolutamente la importancia de Céspedes como el iniciador, partidario además de la separación del estado y la iglesia, el matrimonio civil y las instituciones republicanas.
Un hombre -destacó- que creyó en la educación y en la necesidad de la cultura, porque las revoluciones, como afirmó quien fuera su ferviente seguidor, Fidel Castro, solo pueden ser hijas de las ideas y la cultura.
Leal Spengler participó anoche como orador en la velada político-cultural por el bicentenario del natalicio de Carlos Manuel de Céspedes, la cual tuvo lugar frente al museo ubicado en la casa natal del prócer, en la Plaza de la Revolución, de Bayamo.
Presidieron la emotiva actividad el Primer Vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Salvador Valdés Mesa; Víctor Gaute, Miembro del Secretariado del Comité Central del Partido Comunista de Cuba; Alpidio Alonso, Ministro de Cultura; y las principales autoridades políticas y gubernamentales de la oriental provincia de Granma
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