CONTROL CARACTERÍSTICA CONSULTORIO
DOCTORA Amigas, amigos, ¿cómo están, cómo va esa vida? La vida en general y la vida sexual en particular. Porque en el pasado consultorio, se acuerdan, vimos que hay parejas con diferentes ritmos. Unas son más ardientes, otras más tranquilas. Unas hacen el amor todos los días, otras cada semana o cada mes. El asunto no está en la cantidad, sino en que las dos personas se sientan bien, se sientan felices. Pero el problema comienza cuando uno quiere más o cuando la otra quiere menos. O al revés. El lío se presenta cuando los ritmos de la pareja están disparejos
EFECTO TELÉFONO
DOCTORA Veamos quién nos llama ¿Aló?
MUJER ¿Cómo está, doctorcita Miralles?
DOCTORA Yo, muy bien. ¿Y tú?
MUJER Cansada, doctora Miralles. Cansada.
DOCTORA ¿Y por qué cansada?
MUJER Porque yo estoy como aquel chiste de la vecina que no podía dormir.
DOCTORA ¿Y qué le pasaba a esa vecina? Cuéntame. ¿Por qué no podía dormir?
MUJER Porque si se echaba del lado izquierdo se le subía el hígado. Y si se echaba del lado derecho se le subía el riñón.
DOCTORA ¿Y por qué no dormía boca arriba?
MUJER Porque entonces se le subía el marido.
DOCTORA (SE RÍE) ¡Amiga!
MUJER Así estoy yo, doctora, y le juro que no es una broma. Mi marido siempre está ahí esperando, bajo la sábana, como un gato y se me viene encima quiera que no quiera. Y yo estoy cansada.
DOCTORA Y dime, ¿tú hablas con el gato?
MUJER Yo le digo, yo le explico pero él sigue saltando.
DOCTORA Es ansioso tu marido, ¿no?
MUJER Demasiado, doctora. Y yo no sé qué hacer.
DOCTORA Veamos. Tú tienes que hablar con él. Pero fuera de la cama. Si él es tan ansioso, cuando ya está en posición de ataque el diálogo no va a dar mucho resultado.
MUJER ¿Y qué hago, doctora?
DOCTORA Escúchame bien. Tú tienes que explicarle la diferencia entre cantidad y calidad.
MUJER No la agarro, doctora.
DOCTORA Tu marido es muy cuantitativo No está como los gatos, sino como los gallos. ¿No has escuchado ésa de
CONTROL EL POLVORETE
DOCTORA Así está tu marido, de polvorete en polvorete Mucha cantidad y poca calidad. Porque ni él disfruta mucho, ni te hace disfrutar a ti.
MUJER ¿Y qué le digo, doctora?
DOCTORA Dile que le vas a enseñar los trucos del amor. Dile que consultaste con un gurú que te enseñó el sexo tántrico, una cosa así, medio rara.
MUJER ¿Y entonces?
DOCTORA Entonces, lo vas relajando, vas jugando a los cinco sentidos, le dices que poco a poco se llega lejos Y te entregas a él cuando el almíbar esté a punto de caramelo
MUJER ¿Y él aprenderá, doctora?
DOCTORA Claro que sí. Porque te quiere. Y porque una buena relación, intensa, bonita, vale por dos. O por cuatro. Él va a quedar tan entusiasmado que irá entendiendo que el amor no es cosa de cantidad, sino de calidad. Irá pasando de polvoretes a polvorones.
MUJER Ay, doctora, yo le agradezco tanto
DOCTORA Buena suerte, amiga.
EFECTO TELÉFONO
DOCTORA Veamos ahora ¿Aló?
HOMBRE ¿Y si es al revés, doctora?
DOCTORA ¿Al revés, cómo?
HOMBRE Es que yo tengo una compañerita que Yo soy taxista, ¿usted entiende? Yo llego molido a mi casa, requeteagotado Y desde que abro la puerta, mi mujer ya me está quitando la camisa
DOCTORA La otra con un gato y éste con una gata
HOMBRE Yo le digo que lo dejemos para el domingo, pero ella dice que dame más gasolina, más gasolina Uno llega a la casa con el tanque casi vacío
DOCTORA A ver, amigo. Al mismo síntoma, el mismo remedio. Hablar, dialogar, dile que tú ¿Cómo es que te llamas?
HOMBRE Antonio.
DOCTORA Antonio el taxista. Y que le vas a enseñar los misterios del amor. Pero para enseñárselos, hay que ir al suave, suavemente Así, poco a poco, se irán acoplando, irán ajustando los ritmos sexuales de ambos. Y recuerden, en asuntos de amor, como en casi todos los asuntos, calidad es mejor que cantidad. ¡Hasta la próxima, mis amigos y amigas!
BIBLIOGRAFÍA
Alessandra Rampolla, Sexo ¿y ahora qué hago?, Sudamericana, Buenos Aires 2006.