NARRADOR Hace mucho...
EFECTO RELOJ
NARRADOR … muchísmo tiempo…
EFECTO RELOJ
NARRADOR Una niña paseaba por el bosque y encontró un hermoso árbol de hojas muy verdes y brillantes. Tenía una puerta cerrada y un cartel que decía:
ÁRBOL Soy un árbol encantado. Si adivinas las palabras mágicas, podrás entrar.
NIÑA ¡Qué divertido!
EFECTO MAGIA
NARRADOR La niña lo intentó de muchas formas:
NIÑA Abracadabra… Alakayula chikitiyula... Ábrete Sésamo...
Supercalifragilisticoespiralidoso…
NARRADOR Pronunció todos los hechizos que conocía…
NIÑA Tucu-tu-cum… Chiqui chiquim… Poromponpón...
NARRADOR Pero nada. El árbol encantado seguía con la puerta cerrada.
NIÑA ¡Ay, no... qué desilusión!
NARRADOR Rendida por el cansancio, dijo suplicante:
NIÑA ¡Por favor, arbolito, por favor!
EFECTO CHIRRIDO DE PUERTA
NARRADOR Al instante, se abrió una puerta pequeña en la corteza del árbol.
EFECTO ARPA MÁGICA
NARRADOR La niña entró y escuchó una voz:
ÁRBOL Si dices la segunda palabra mágica, encontrarás el tesoro escondido.
NIÑA ¿La segunda? ¿Y cómo podré adivinarla?
NARRADOR La niña tenía miedo porque dentro del árbol todo estaba oscuro. Entonces, las hojas muy verdes y brillantes se iluminaron y proyectaron una luz suave a través de la corteza.
NIÑA ¡Gracias, arbolito!
NARRADOR Y el árbol le dijo con ternura:
ÁRBOL Ésa, ésa es la segunda palabra.
NARRADOR Al instante, la niña vio a sus pies un cofre lleno de cuentos y chocolates.
CONTROL MÚSICA EMOTIVA
NARRADOR Cuentan que la niña recordó siempre aquellas palabras mágicas, “por favor” y “gracias”, que abren las puertas del corazón de todas las personas.