CONTROL MÚSICA SUAVE Y MÁGICA
LOCUTORA Parecía un bosque encantado a orillas del mar. La brisa, el olor refrescante del salitre, los árboles de palo santo cuajados de manzanas gigantes y rojas.
CONTROL SUBE MÚSICA MÁGICA
LOCUTORA Pero no, no eran manzanas. Eran pájaros. El bosque estaba colmado de una de las aves más pintorescas del planeta: la fragata real.
EFECTO REVOLOTEO Y GORJEOS
LOCUTOR La pequeña isla Seymour Norte, en el archipiélago de Galápagos, es cómplice todos los años del apasionado romance de las fragatas.
LOCUTORA Negras y de gran tamaño, con la cola bifurcada, ninguna otra ave marina les gana haciendo acrobacias en el aire. Sin mucho aceite en las alas, prefieren no zambullirse y persiguen hasta el cansancio a otras aves para piratearles el alimento.
LOCUTOR Pescan sobre la superficie del mar en fracciones de segundo. Capturan hasta los peces voladores. Las fragatas son las dueñas del aire.
CONTROL MÚSICA ROMÁNTICA
LOCUTORA Pero cuando el amor llama, cuando es tiempo de aparearse, estos magníficos aviadores olvidan la pesca y las piruetas aéreas.
LOCUTOR Los machos se posan en los árboles. Para llamar la atención de las hembras, hinchan una membrana de color rojo intenso que tienen en el buche.
LOCUTORA Arriba, sobrevuelan las hembras. Están decidiendo qué pareja les gusta más. Suben y bajan, planean, no se deciden.
LOCUTOR Los machos se impacientan y tensan aún más las bolsas rojas, como globos relucientes. Parecen reventar con la presión.
LOCUTORA Pero las hembras siguen revoloteando sobre el bosque sin mostrar ninguna prisa.
LOCUTOR Los machos ya no saben qué más hacer para atraer a las indecisas parejas. Abren las enormes alas, agitándolas vigorosamente. El castañeteo que hacen con el pico vuelve más apremiante el encuentro.
LOCUTORA Una hembra se ha sentido seducida por esta exhibición. Aterriza junto al macho. Éste mueve la cabeza a uno y otro lado, saludándola. Ella corresponde de igual forma. La pareja hace sonar sus picos en señal de alegría. Cuando la hembra da su consentimiento, sólo entonces el macho la toca, envolviéndola con una de sus alas. Y hacen el amor.
CONTROL MÚSICA ROMÁNTICA
LOCUTOR La luna de miel comienza con la construcción del nido. Ambos acarrean las ramitas sobre las que la hembra pondrá un huevo, sólo uno. Y ambos también se dedican a incubarlo en turnos de una semana.
LOCUTORA Cuando nace el polluelo, madre y padre lo protegen. Comerá en la boca de ellos, echará plumas, se quedara en el nido varios meses antes de buscar el alimento por su cuenta. Todavía necesitará cinco años para aprender de sus padres todos los trucos del oficio de volar.
CONTROL ALETEOS
LOCUTORA Isla Seymour Norte, en el archipiélago de Galápagos. Han pasado unos meses y nuevamente el bosque se ha vuelto encantado. Los árboles se han cargado de manzanas gigantes. Son las fragatas reales que vuelven a hinchar sus buches rojos, llamando a la compañera, esperando el amor.
BIBLIOGRAFÍA
Michael H. Jackson, Galápagos, Fundación Charles Darwin, Calgary Press, 1997.
LOCUTORA Parecía un bosque encantado a orillas del mar. La brisa, el olor refrescante del salitre, los árboles de palo santo cuajados de manzanas gigantes y rojas.
CONTROL SUBE MÚSICA MÁGICA
LOCUTORA Pero no, no eran manzanas. Eran pájaros. El bosque estaba colmado de una de las aves más pintorescas del planeta: la fragata real.
EFECTO REVOLOTEO Y GORJEOS
LOCUTOR La pequeña isla Seymour Norte, en el archipiélago de Galápagos, es cómplice todos los años del apasionado romance de las fragatas.
LOCUTORA Negras y de gran tamaño, con la cola bifurcada, ninguna otra ave marina les gana haciendo acrobacias en el aire. Sin mucho aceite en las alas, prefieren no zambullirse y persiguen hasta el cansancio a otras aves para piratearles el alimento.
LOCUTOR Pescan sobre la superficie del mar en fracciones de segundo. Capturan hasta los peces voladores. Las fragatas son las dueñas del aire.
CONTROL MÚSICA ROMÁNTICA
LOCUTORA Pero cuando el amor llama, cuando es tiempo de aparearse, estos magníficos aviadores olvidan la pesca y las piruetas aéreas.
LOCUTOR Los machos se posan en los árboles. Para llamar la atención de las hembras, hinchan una membrana de color rojo intenso que tienen en el buche.
LOCUTORA Arriba, sobrevuelan las hembras. Están decidiendo qué pareja les gusta más. Suben y bajan, planean, no se deciden.
LOCUTOR Los machos se impacientan y tensan aún más las bolsas rojas, como globos relucientes. Parecen reventar con la presión.
LOCUTORA Pero las hembras siguen revoloteando sobre el bosque sin mostrar ninguna prisa.
LOCUTOR Los machos ya no saben qué más hacer para atraer a las indecisas parejas. Abren las enormes alas, agitándolas vigorosamente. El castañeteo que hacen con el pico vuelve más apremiante el encuentro.
LOCUTORA Una hembra se ha sentido seducida por esta exhibición. Aterriza junto al macho. Éste mueve la cabeza a uno y otro lado, saludándola. Ella corresponde de igual forma. La pareja hace sonar sus picos en señal de alegría. Cuando la hembra da su consentimiento, sólo entonces el macho la toca, envolviéndola con una de sus alas. Y hacen el amor.
CONTROL MÚSICA ROMÁNTICA
LOCUTOR La luna de miel comienza con la construcción del nido. Ambos acarrean las ramitas sobre las que la hembra pondrá un huevo, sólo uno. Y ambos también se dedican a incubarlo en turnos de una semana.
LOCUTORA Cuando nace el polluelo, madre y padre lo protegen. Comerá en la boca de ellos, echará plumas, se quedara en el nido varios meses antes de buscar el alimento por su cuenta. Todavía necesitará cinco años para aprender de sus padres todos los trucos del oficio de volar.
CONTROL ALETEOS
LOCUTORA Isla Seymour Norte, en el archipiélago de Galápagos. Han pasado unos meses y nuevamente el bosque se ha vuelto encantado. Los árboles se han cargado de manzanas gigantes. Son las fragatas reales que vuelven a hinchar sus buches rojos, llamando a la compañera, esperando el amor.
BIBLIOGRAFÍA
Michael H. Jackson, Galápagos, Fundación Charles Darwin, Calgary Press, 1997.
