PROGRAMA N.° 2. “TODOS LOS HOMBRES SON IGUALES, Y LAS MUJERES ESTÁN CORTADAS CON LA MISMA TIJERA”
Adán: Compadre, compadre, ¿sabe cuál es el día de la mujer?
Compadre: No, compadre, no sé, ¿cuál es el día de la mujer?
Adán: El día menos pensado.
(Risas)
Comadre: Uy, ¡qué chiste tan malo! Ustedes saben ¿en qué se parecen los hombres a los aguacates?
Adán y Compadre: No. No sabemos
Adán: ¿En qué se parecen los hombres a los aguacates…? No, ni idea.
Comadre: En que algunos tardan en madurar y otros vienen podridos.
(Sonido de discusión no se escucha palabras claramente pero son Comentarios machistas y/o feministas–)
Vitalia: Dejen la bulla, que mi tienda me la respetan, o si no dejo de llamarme Vitalia Margarita viuda de Flórez, que ni una flor me regaló, pero era mi marido y me dijo que si se iba para los cielos me hiciera respetar como mujer, así que a mí esos chistecitos no me gustan, pónganle atención al programa de Evita, que ya comienza, ese sí está bien bueno y enseñan cosas importantes. Comadre, Súbale.
(Sonido radio sintonizándose)
Música: Expresiones musicales Gercus track N.° 2
CABEZOTE
Locutor (a) 1: La Gobernación de Boyacá, la Secretaría de Salud del departamento y el Grupo de investigación Exclusiones y Resistencias en el Cuidado de la Salud GERCUS de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia presentan:
Locutor 2 (a): Evita el maltrato.
Locutor (a) 1: Programa institucional dentro del Proyecto “ESTRATEGIA DE INFORMACIÓN, EDUCACIÓN Y COMUNICACIÓN PARA EL DESARROLLO DEL COMPONENTE DEL BUEN TRATO EN BOYACÁ. Un esfuerzo conjunto para la promoción del Buen Trato, del Cuidado de la Salud GERCUS mental y de la adopción de rutas de atención de violencia intrafamiliar para los niños, las niñas y los adultos de todos los municipios del departamento.
Locutor (a) 2: Bienvenidos y bienvenidas.
Eva: Soy Evangelina de Brusco, y este es su programa Evita el maltrato. Hoy vamos a hablar de un tema ¡rebien importante! para entendernos entre hombres y mujeres.
La pregunta de si los hombres y las mujeres son “iguales” en derechos y deberes; en este programa oiremos las principales diferencias generales entre ambos… y cuando digo en general es porque se presenta en la mayoría de circunstancias y a lo largo de la historia. Uno de los problemas es que siempre generalizamos y decimos, por ejemplo: ‘los hombres son más fuertes que las mujeres’, uyyy pero yo si he visto que hay mujeres también fuertes, eso no debería preocuparnos si no tuviéramos la ambición de ser mejor que el otro para poder controlarlo, ese es el problema
(Alegre) Pero como siempre tenemos a una experta en el tema, en esta oportunidad tenemos una mujer socióloga, profesora de la Uptc, Vilma Blanco, a quien le damos la bienvenida. Sumerce cuéntenos, eso ¿desde dónde vienen estas diferencias y por qué están tan marcadas en la sociedad?
Invitada: saludo e intervención (2 minutos)
La respuesta de la invitada va cerrándose con la entrada de música (Track 2 cortinas musicales GERCUS) y después ruido de tienda, al fondo se escucha la música del radio)
Compadre: Adán, compadre, le tengo otro chiste, a que no sabe ¿cuál es el femenino de echar siesta?
Adán: ¿El femenino de echar siesta? Ay, ahorita no sé.
Compadre: Es muy fácil compadre, que más va a ser, pues Lavar platos. (Ríe solo)
Adán: Ay, no compadre, ahorita no, que estoy escuchando el programa, la que habla es mi esposa.
Compadre: Oiga compadre ¿La comadre Eva es la que parlotea por el radio?
Vitalia: Shhh…, dejen oír o se van a limpiar el frente de la tienda, groseros lengüilargos.
(Sonido de radio bien sintonizado)
Eva: Pero, Profesora entonces, ¿es realidad que los hombres siempre han sido más violentos que las mujeres?
Invitada: (1 minuto)
Eva: Muchas veces creemos que algunos comportamientos violentos son normales, e incluso se toman como algo natural, y oímos decir que “él me pega porque "me quiere", como lo he oído de alguna comadre, pero se cae en la trampa y uno no nace para ser golpeada por nadie, ni maltratada de las formas que vimos en el programa anterior: que física, que psicológica, social menos aun maltratada sexualmente (en tono de indirecta para Adán)
Sonido (radio-tienda)
Vitalia: Uichh, lo que hay que oír y lo que hay que ver; ¿no cierto, don Adán?, ¿y se les acabó la risa o qué fue lo que pasó?
Adán: Es que viéndolo de esa manera el asunto no es tan chistoso, es que cuando uno se ve reflejado es que entiende que las vainas son a otro nivel, y viéndome en los otros es que yo reconozco que se me iba pasando la fuerza, ¿sí o no, compadre?, ¿compadre? Ve, y el compadre ¿qué se me hizo?
Vitalia: Se desaparecieron con la comadre, ¿será que tendrían algún pleito atravesado y se fueron de reconciliación?
Adán: ¿Pleito?, ¿conciliación? Vitalia, menos mal que me acordó, le debo una plata a don Lázaro y si no le pago…, me mando razón de que me pasaba las letras al Juzgado y ahí sí ni formas de volver a conquistar a Eva.
Vitalia: Eso, vaya, vaya y soluciona el problema con el viejo Lázaro, que es terco y medio sordo, pero es buena gente, además siguen siendo familia, porque es el abuelo de sus hijos.
Adán: Sí, qué pena dejarla sola, me voy volando
Vitalia: Eso, ahueque el ala, pero háblele con calma, no se vaya a poner alzado, porque no le va bien, yo me quedo con mi radio y mi programa.
(Sube el volumen al radio)
Eva: Con el patrocinio de colchón “La Ternura”: “La cama que más dura tiene un colchón La Ternura”
CABEZOTE: Vamos a escucharnos en las voces de nuestra gente.
Sonido (teléfono)
Eva: ¿Aló? Guenas, ¿con quién tenemos el gusto de comunicarnos a esta hora?
Compadre: ¿Aló? ¿De dónde me hablan?, ¿de la emisora? Ahh es para participar en el programa: no voy a decir mi nombre, tal vez por cobarde o no sé, solo quiero saber por qué a veces tengo reacciones violentas con mi mujer, no la he golpeado al grado de darle un puñetazo o una patada, pero sí la he lastimado al agarrarla y al obligarla a que me haga caso. A veces me paso de fuerza y lastimo sus brazos, le dejo moretones por los apretones. ¿Me pueden ayudar?
Eva: Yo creo que usted acaba de tomar la decisión de ayudarse, lo felicito porque este es el primer paso. Escuchemos qué le dice nuestra invitada.
Invitada: (1 minuto)
Eva: Espero que lo pensemos mejor, porque cada uno desenreda su propio ovillo con ayuda de todos, ¿algo que quiera decir nuestro oyente?
Compadre: Sí, que me he convertido en un hombre violento con mi pareja. Con el primer grito me perdí a mí mismo y luego la perdí a ella. Es que me siento muy mal desde que me dejó. Con la violencia, lo perdemos todo. Ahora soy un hombre muy triste, así haga chistes todo el tiempo. A quienes aún pueden solucionar sus problemas, háganlo por las buenas. Gracias.
Eva: Tenemos otra llamada (alegre). ¿Aló? ¡Buenas!
Vecina: Buenas. Yo quiero que ustedes escuchen mi caso. Él al principio nunca me tocó, pero después, por dejar caer un plato, me pegó; pero me prometió no volver a hacerlo, a menos que le diera una razón, y ahora se inventa razones y me da hasta dejarme unos moretones. Tengo miedo de terminar con él porque conoce a mi familia, y tengo miedo de que le haga daño, y tampoco puedo dejarlo porque le agradezco mucho y yo creo que merezco que me golpee o me insulte cuando le hago mal las cosas; pero para mí también me es difícil, pues nunca aprueba lo que hago, y debo hacerlo a escondidas. No sé qué debo hacer, me siento muy confundida y muy culpable.
Invitada: (2 minutos)
Eva: Generalmente, cuando uno está en esa situación siempre piensa “Es que lo quiero”, “Si no fuera por los niños”, “No tengo dónde ir”, “¿De qué vamos a vivir?”, “Le tengo miedo”, etc. La verdad es que uno si necesita de alguien que lo acompañe y lo escuche, que lo ayude a perder el miedo. Por ejemplo que si uno se acerca al puesto de salud las enfermeras le escuchen sus vivencias, y entender que todas somos distintas. Así uno poquito a poco va sacando sus fuerzas y recuperando su vida, pero lo primordial es tomar la iniciativa y decir no más. Yo si creo, y se los digo a todas por experiencia propia que las mujeres que sobreviven a la violencia día tras día y permanecen en la relación de maltrato necesitan reconstruirse de tal manera que recuperen la autoestima perdida, o puedan construir la que nunca tuvieron, ya que es la mejor manera de protegerse y obtener poder sobre sus vidas.
CABEZOTE: Cuanto la necesite, cuando se sienta vacío o vacía, solo hay que decir: ¡ayúdame, música!
Música (Aterciopelados, la Misma Tijera. 3´03´´)
(Bajando el volumen de la canción y entra sonido de ambiente calle)
Adán: Buenas tardes, don Lázaro, ¿está dormido o despierto?
Lázaro: ¿Ahh?
Adán: Don Lázaro, ¡es peligroso que se quede dormido en la mecedora!
Lázaro: Uy, sí, qué peligro con esa Senadora. ¿Adán? milagrosos los ojos que lo ven por aquí.
Adán: Sí, señor, es que vengo a arreglar lo de la plata, a ver si me da un plazo.
Lázaro: Yo no tengo lazos; hace rato que no tengo vacas para tener lazos.
Adán: No, plazo para no pagarle esta semana sino la otra.
Lázaro: Eso sí se lo escuché, que no va a pagar, repolillo sinvergüenza… ¡Agua, agüita!
Adán: Le traigo agua o está llamando a su esposa.
Lázaro: Pues a mi mujer, para que me acompañe al Juzgado. ¡Para que vea!
Adán: No, don Lázaro, no haga tanto escándalo, ni se me fatigue, no vaya a morirse.
Lázaro: Ahh, es que ahí está pintado usted, igualitico a su agüelo y a su papá, irresponsable, borracho, mujeriego…
Adán: No, don Lázaro, aguarde que tampoco somos tan…
Lázaro: calle más bien, no chiste nada que entre más habla más la embarra, y lo pior es que andespués andan diciendo que toiticos los hombres somos iguales… ahh pero a mí sí que me saquen de ese costal.
Sonido de radio sintonizándose
CABEZOTE Otras formas de hablar, mil y una palabras bonitas, aleje las groserías y póngale ganas a lo que habla, pongan en su boca… palabras amorosas.
Dios te hizo hombre para mí.
Te admiro desde lo más profundo
de mi subconsciente,
con una admiración extraña y desbordada
que tiene un dobladillo de ternura.
Tus problemas, tus cosas
me intrigan, me interesan
y te observo
mientras discurres y discutes
hablando del mundo
y dándole una nueva geografía de palabras
Mi mente está covada para recibirte,
para pensar tus ideas
y darte a pensar las mías;
te siento, mi compañero, hermoso
juntos somos completos
y nos miramos con orgullo
conociendo nuestras diferencias
sabiéndonos mujer y hombre
y apreciando la disimilitud
de nuestros cuerpos.
Eva: Uyyyy sumercé, no perdamos la posibilidad de encontramos diferentes pero sintiéndonos igualitos. Que gueno es recordar las palabras de esta poetiza nicaragüense Gioconda belli
Pero bueno, regresamos a su programa “Evita el Maltrato”, hoy estamos hablando del maltrato de pareja y de las diferencias que tenemos entre los hombres y las mujeres. Ya vimos las características y las reacciones, pero, profe Vilma, cuéntenos ¿cómo por qué surgen esas diferencias de roles entre hombre y mujeres?
Invitada: (2 minutos)
Eva: ¿Y a las mujeres también se les puede diferenciar entre ellas, profesora?
Invitada: (1 minuto)
(Sonido de radio desintonizado; ambiente de tienda)
Adán: Buenas.
Vitalia: Yo me estaba preguntado qué se habían hecho todos que me dejaron la tienda sola. ¿Qué le dijo don Lázaro?, ¿le perdonó la deuda?
Adán: Pues perdonarla como tal, pues no, pero lo logré calmar porque estaba como alma que se la llevaba el diablo, en fin me dio una semana de plazo, mejor dicho, sigo jodido pero radiante.
Vitalia: Ole, ¿y su compadre?
Adán: Pues lo vi como caribajito, algo tiene, anda como triste.
Vitalia: Así como usted.
Adán: Sin gracia por la vida.
Vitalia: Así como usted.
Adán: Con ganas de chupar gladiolo, de colgar los guayos.
Vitalia: Mejor dicho, apendejao, así como usted.
Adán: Bueno, tampoco se pase, Vitalia.
Vitalia (asustada): Ya, tranquilito, no se despeluque, Adán, que cuando se altera se le brotan las venas, los ojos se le desorbitan, se pone rojo como un tomate de árbol y pareciera que fuera otro, hasta miedo da.
Adán (calmándose): Pues eso era lo que me decía mi Evangelina, pero no le hice caso y ahora míreme…
Vitalia: Sí, como perro sin dueño, como barco sin rumbo, como gusano entre la huerta, como…
Adán: Bueno, ¿pero en qué quedamos?, ¿no dijimos que nos íbamos a tratar con respeto?
Vitalia: Ay, juemichica verdad, es que no es fácil, pero hay que intentarlo.
(Sonido radio)
Locutor 1: La Gobernación de Boyacá, la Secretaría de Salud del departamento y el Grupo Gercus, de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia, presentaron:
Locutor 2: Evita el maltrato.
Locutor 1: Programa institucional dentro del Proyecto “ESTRATEGIA DE INFORMACIÓN, EDUCACIÓN Y COMUNICACIÓN PARA EL DESARROLLO DEL COMPONENTE DEL BUEN TRATO EN BOYACÁ. Un esfuerzo conjunto para la promoción del Buen Trato, del Cuidado de la Salud GERCUS mental y de la adopción de rutas de atención de violencia intrafamiliar para los niños, las niñas y los adultos de todos los municipios del departamento.
Locutor 2: Hasta pronto.
Adán: Compadre, compadre, ¿sabe cuál es el día de la mujer?
Compadre: No, compadre, no sé, ¿cuál es el día de la mujer?
Adán: El día menos pensado.
(Risas)
Comadre: Uy, ¡qué chiste tan malo! Ustedes saben ¿en qué se parecen los hombres a los aguacates?
Adán y Compadre: No. No sabemos
Adán: ¿En qué se parecen los hombres a los aguacates…? No, ni idea.
Comadre: En que algunos tardan en madurar y otros vienen podridos.
(Sonido de discusión no se escucha palabras claramente pero son Comentarios machistas y/o feministas–)
Vitalia: Dejen la bulla, que mi tienda me la respetan, o si no dejo de llamarme Vitalia Margarita viuda de Flórez, que ni una flor me regaló, pero era mi marido y me dijo que si se iba para los cielos me hiciera respetar como mujer, así que a mí esos chistecitos no me gustan, pónganle atención al programa de Evita, que ya comienza, ese sí está bien bueno y enseñan cosas importantes. Comadre, Súbale.
(Sonido radio sintonizándose)
Música: Expresiones musicales Gercus track N.° 2
CABEZOTE
Locutor (a) 1: La Gobernación de Boyacá, la Secretaría de Salud del departamento y el Grupo de investigación Exclusiones y Resistencias en el Cuidado de la Salud GERCUS de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia presentan:
Locutor 2 (a): Evita el maltrato.
Locutor (a) 1: Programa institucional dentro del Proyecto “ESTRATEGIA DE INFORMACIÓN, EDUCACIÓN Y COMUNICACIÓN PARA EL DESARROLLO DEL COMPONENTE DEL BUEN TRATO EN BOYACÁ. Un esfuerzo conjunto para la promoción del Buen Trato, del Cuidado de la Salud GERCUS mental y de la adopción de rutas de atención de violencia intrafamiliar para los niños, las niñas y los adultos de todos los municipios del departamento.
Locutor (a) 2: Bienvenidos y bienvenidas.
Eva: Soy Evangelina de Brusco, y este es su programa Evita el maltrato. Hoy vamos a hablar de un tema ¡rebien importante! para entendernos entre hombres y mujeres.
La pregunta de si los hombres y las mujeres son “iguales” en derechos y deberes; en este programa oiremos las principales diferencias generales entre ambos… y cuando digo en general es porque se presenta en la mayoría de circunstancias y a lo largo de la historia. Uno de los problemas es que siempre generalizamos y decimos, por ejemplo: ‘los hombres son más fuertes que las mujeres’, uyyy pero yo si he visto que hay mujeres también fuertes, eso no debería preocuparnos si no tuviéramos la ambición de ser mejor que el otro para poder controlarlo, ese es el problema
(Alegre) Pero como siempre tenemos a una experta en el tema, en esta oportunidad tenemos una mujer socióloga, profesora de la Uptc, Vilma Blanco, a quien le damos la bienvenida. Sumerce cuéntenos, eso ¿desde dónde vienen estas diferencias y por qué están tan marcadas en la sociedad?
Invitada: saludo e intervención (2 minutos)
La respuesta de la invitada va cerrándose con la entrada de música (Track 2 cortinas musicales GERCUS) y después ruido de tienda, al fondo se escucha la música del radio)
Compadre: Adán, compadre, le tengo otro chiste, a que no sabe ¿cuál es el femenino de echar siesta?
Adán: ¿El femenino de echar siesta? Ay, ahorita no sé.
Compadre: Es muy fácil compadre, que más va a ser, pues Lavar platos. (Ríe solo)
Adán: Ay, no compadre, ahorita no, que estoy escuchando el programa, la que habla es mi esposa.
Compadre: Oiga compadre ¿La comadre Eva es la que parlotea por el radio?
Vitalia: Shhh…, dejen oír o se van a limpiar el frente de la tienda, groseros lengüilargos.
(Sonido de radio bien sintonizado)
Eva: Pero, Profesora entonces, ¿es realidad que los hombres siempre han sido más violentos que las mujeres?
Invitada: (1 minuto)
Eva: Muchas veces creemos que algunos comportamientos violentos son normales, e incluso se toman como algo natural, y oímos decir que “él me pega porque "me quiere", como lo he oído de alguna comadre, pero se cae en la trampa y uno no nace para ser golpeada por nadie, ni maltratada de las formas que vimos en el programa anterior: que física, que psicológica, social menos aun maltratada sexualmente (en tono de indirecta para Adán)
Sonido (radio-tienda)
Vitalia: Uichh, lo que hay que oír y lo que hay que ver; ¿no cierto, don Adán?, ¿y se les acabó la risa o qué fue lo que pasó?
Adán: Es que viéndolo de esa manera el asunto no es tan chistoso, es que cuando uno se ve reflejado es que entiende que las vainas son a otro nivel, y viéndome en los otros es que yo reconozco que se me iba pasando la fuerza, ¿sí o no, compadre?, ¿compadre? Ve, y el compadre ¿qué se me hizo?
Vitalia: Se desaparecieron con la comadre, ¿será que tendrían algún pleito atravesado y se fueron de reconciliación?
Adán: ¿Pleito?, ¿conciliación? Vitalia, menos mal que me acordó, le debo una plata a don Lázaro y si no le pago…, me mando razón de que me pasaba las letras al Juzgado y ahí sí ni formas de volver a conquistar a Eva.
Vitalia: Eso, vaya, vaya y soluciona el problema con el viejo Lázaro, que es terco y medio sordo, pero es buena gente, además siguen siendo familia, porque es el abuelo de sus hijos.
Adán: Sí, qué pena dejarla sola, me voy volando
Vitalia: Eso, ahueque el ala, pero háblele con calma, no se vaya a poner alzado, porque no le va bien, yo me quedo con mi radio y mi programa.
(Sube el volumen al radio)
Eva: Con el patrocinio de colchón “La Ternura”: “La cama que más dura tiene un colchón La Ternura”
CABEZOTE: Vamos a escucharnos en las voces de nuestra gente.
Sonido (teléfono)
Eva: ¿Aló? Guenas, ¿con quién tenemos el gusto de comunicarnos a esta hora?
Compadre: ¿Aló? ¿De dónde me hablan?, ¿de la emisora? Ahh es para participar en el programa: no voy a decir mi nombre, tal vez por cobarde o no sé, solo quiero saber por qué a veces tengo reacciones violentas con mi mujer, no la he golpeado al grado de darle un puñetazo o una patada, pero sí la he lastimado al agarrarla y al obligarla a que me haga caso. A veces me paso de fuerza y lastimo sus brazos, le dejo moretones por los apretones. ¿Me pueden ayudar?
Eva: Yo creo que usted acaba de tomar la decisión de ayudarse, lo felicito porque este es el primer paso. Escuchemos qué le dice nuestra invitada.
Invitada: (1 minuto)
Eva: Espero que lo pensemos mejor, porque cada uno desenreda su propio ovillo con ayuda de todos, ¿algo que quiera decir nuestro oyente?
Compadre: Sí, que me he convertido en un hombre violento con mi pareja. Con el primer grito me perdí a mí mismo y luego la perdí a ella. Es que me siento muy mal desde que me dejó. Con la violencia, lo perdemos todo. Ahora soy un hombre muy triste, así haga chistes todo el tiempo. A quienes aún pueden solucionar sus problemas, háganlo por las buenas. Gracias.
Eva: Tenemos otra llamada (alegre). ¿Aló? ¡Buenas!
Vecina: Buenas. Yo quiero que ustedes escuchen mi caso. Él al principio nunca me tocó, pero después, por dejar caer un plato, me pegó; pero me prometió no volver a hacerlo, a menos que le diera una razón, y ahora se inventa razones y me da hasta dejarme unos moretones. Tengo miedo de terminar con él porque conoce a mi familia, y tengo miedo de que le haga daño, y tampoco puedo dejarlo porque le agradezco mucho y yo creo que merezco que me golpee o me insulte cuando le hago mal las cosas; pero para mí también me es difícil, pues nunca aprueba lo que hago, y debo hacerlo a escondidas. No sé qué debo hacer, me siento muy confundida y muy culpable.
Invitada: (2 minutos)
Eva: Generalmente, cuando uno está en esa situación siempre piensa “Es que lo quiero”, “Si no fuera por los niños”, “No tengo dónde ir”, “¿De qué vamos a vivir?”, “Le tengo miedo”, etc. La verdad es que uno si necesita de alguien que lo acompañe y lo escuche, que lo ayude a perder el miedo. Por ejemplo que si uno se acerca al puesto de salud las enfermeras le escuchen sus vivencias, y entender que todas somos distintas. Así uno poquito a poco va sacando sus fuerzas y recuperando su vida, pero lo primordial es tomar la iniciativa y decir no más. Yo si creo, y se los digo a todas por experiencia propia que las mujeres que sobreviven a la violencia día tras día y permanecen en la relación de maltrato necesitan reconstruirse de tal manera que recuperen la autoestima perdida, o puedan construir la que nunca tuvieron, ya que es la mejor manera de protegerse y obtener poder sobre sus vidas.
CABEZOTE: Cuanto la necesite, cuando se sienta vacío o vacía, solo hay que decir: ¡ayúdame, música!
Música (Aterciopelados, la Misma Tijera. 3´03´´)
(Bajando el volumen de la canción y entra sonido de ambiente calle)
Adán: Buenas tardes, don Lázaro, ¿está dormido o despierto?
Lázaro: ¿Ahh?
Adán: Don Lázaro, ¡es peligroso que se quede dormido en la mecedora!
Lázaro: Uy, sí, qué peligro con esa Senadora. ¿Adán? milagrosos los ojos que lo ven por aquí.
Adán: Sí, señor, es que vengo a arreglar lo de la plata, a ver si me da un plazo.
Lázaro: Yo no tengo lazos; hace rato que no tengo vacas para tener lazos.
Adán: No, plazo para no pagarle esta semana sino la otra.
Lázaro: Eso sí se lo escuché, que no va a pagar, repolillo sinvergüenza… ¡Agua, agüita!
Adán: Le traigo agua o está llamando a su esposa.
Lázaro: Pues a mi mujer, para que me acompañe al Juzgado. ¡Para que vea!
Adán: No, don Lázaro, no haga tanto escándalo, ni se me fatigue, no vaya a morirse.
Lázaro: Ahh, es que ahí está pintado usted, igualitico a su agüelo y a su papá, irresponsable, borracho, mujeriego…
Adán: No, don Lázaro, aguarde que tampoco somos tan…
Lázaro: calle más bien, no chiste nada que entre más habla más la embarra, y lo pior es que andespués andan diciendo que toiticos los hombres somos iguales… ahh pero a mí sí que me saquen de ese costal.
Sonido de radio sintonizándose
CABEZOTE Otras formas de hablar, mil y una palabras bonitas, aleje las groserías y póngale ganas a lo que habla, pongan en su boca… palabras amorosas.
Dios te hizo hombre para mí.
Te admiro desde lo más profundo
de mi subconsciente,
con una admiración extraña y desbordada
que tiene un dobladillo de ternura.
Tus problemas, tus cosas
me intrigan, me interesan
y te observo
mientras discurres y discutes
hablando del mundo
y dándole una nueva geografía de palabras
Mi mente está covada para recibirte,
para pensar tus ideas
y darte a pensar las mías;
te siento, mi compañero, hermoso
juntos somos completos
y nos miramos con orgullo
conociendo nuestras diferencias
sabiéndonos mujer y hombre
y apreciando la disimilitud
de nuestros cuerpos.
Eva: Uyyyy sumercé, no perdamos la posibilidad de encontramos diferentes pero sintiéndonos igualitos. Que gueno es recordar las palabras de esta poetiza nicaragüense Gioconda belli
Pero bueno, regresamos a su programa “Evita el Maltrato”, hoy estamos hablando del maltrato de pareja y de las diferencias que tenemos entre los hombres y las mujeres. Ya vimos las características y las reacciones, pero, profe Vilma, cuéntenos ¿cómo por qué surgen esas diferencias de roles entre hombre y mujeres?
Invitada: (2 minutos)
Eva: ¿Y a las mujeres también se les puede diferenciar entre ellas, profesora?
Invitada: (1 minuto)
(Sonido de radio desintonizado; ambiente de tienda)
Adán: Buenas.
Vitalia: Yo me estaba preguntado qué se habían hecho todos que me dejaron la tienda sola. ¿Qué le dijo don Lázaro?, ¿le perdonó la deuda?
Adán: Pues perdonarla como tal, pues no, pero lo logré calmar porque estaba como alma que se la llevaba el diablo, en fin me dio una semana de plazo, mejor dicho, sigo jodido pero radiante.
Vitalia: Ole, ¿y su compadre?
Adán: Pues lo vi como caribajito, algo tiene, anda como triste.
Vitalia: Así como usted.
Adán: Sin gracia por la vida.
Vitalia: Así como usted.
Adán: Con ganas de chupar gladiolo, de colgar los guayos.
Vitalia: Mejor dicho, apendejao, así como usted.
Adán: Bueno, tampoco se pase, Vitalia.
Vitalia (asustada): Ya, tranquilito, no se despeluque, Adán, que cuando se altera se le brotan las venas, los ojos se le desorbitan, se pone rojo como un tomate de árbol y pareciera que fuera otro, hasta miedo da.
Adán (calmándose): Pues eso era lo que me decía mi Evangelina, pero no le hice caso y ahora míreme…
Vitalia: Sí, como perro sin dueño, como barco sin rumbo, como gusano entre la huerta, como…
Adán: Bueno, ¿pero en qué quedamos?, ¿no dijimos que nos íbamos a tratar con respeto?
Vitalia: Ay, juemichica verdad, es que no es fácil, pero hay que intentarlo.
(Sonido radio)
Locutor 1: La Gobernación de Boyacá, la Secretaría de Salud del departamento y el Grupo Gercus, de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia, presentaron:
Locutor 2: Evita el maltrato.
Locutor 1: Programa institucional dentro del Proyecto “ESTRATEGIA DE INFORMACIÓN, EDUCACIÓN Y COMUNICACIÓN PARA EL DESARROLLO DEL COMPONENTE DEL BUEN TRATO EN BOYACÁ. Un esfuerzo conjunto para la promoción del Buen Trato, del Cuidado de la Salud GERCUS mental y de la adopción de rutas de atención de violencia intrafamiliar para los niños, las niñas y los adultos de todos los municipios del departamento.
Locutor 2: Hasta pronto.
