Al calmarle progresivamente el dolor estomacal a Panchito, doña Juana cuenta un cuento de antaño Tarukamanta, para que su hijo pueda consolar el sueño, pues a ella también le habían contado hace mucho tiempo:
Érase una vez .Un par de hermanos, uno era el bueno y humilde; el otro era una persona ambiciosa, pues había dejado en la miseria a su propio hermano, pero un día se revierten las cosas por una cuestión de suerte o milagro según la narración del cuento.