CONTROL CARACTERÍSTICA CONSULTORIO
DOCTORA Amigas, amigos, ¿cómo están? ¿Cómo la van pasando? Seguro que bien. Y yo también porque todavía me estoy riendo de un mensaje que me llegó de un oyente. Esuchen, dice así:
CONTROL MÚSICA TRANSICIÓN
HOMBRE Doctora Miralles, usted siempre defiende a las mujeres, siempre se pone de parte de ellas. Pero se equivoca. Muchos de los problemas que ellas tienen, ellas mismas se los buscan. Fíjese solamente cómo se tratan entre ellas. Unas contra otras, todas contra todas. Con razón dicen que la mujer es el enemigo número uno de la mujer.
CONTROL MÚSICA TRANSICIÓN
DOCTORA Me río porque quien dice eso... es un hombre. Pero, en fin, vamos a conversar de eso hoy en este consultorio. ¿Será verdad lo que dice este señor que las mujeres somos las peores enemigas de las otras mujeres?
EFECTO TELÉFONO
DOCTORA Como que el tema despierta interés... Veamos quién nos llama... ¿aló?
INTELECTUAL Aló... ¿doctora Miralles?... Verá, doctora, respecto a la pregunta planteada, le diré que es una verdad incontrastable. La sicología moderna muestra y demuestra que las relaciones femeninas se basan en la rivalidad.
DOCTORA ¿En serio?
INTELECTUAL Las mujeres, por ejemplo, no se arreglan para el marido, sino para competir en belleza con las otras mujeres... No estudian porque tengan interés en estudiar, sino para sobresalir respecto a otras mujeres. No trabajan porque...
DOCTORA Un momento, un momento, mi estimado. Lo interrumpo para una pregunta. ¿De qué sicólogía moderna me está hablando? ¿Qué autores, cuáles son esos sicólogos?
INTELECTUAL Pues... diversos autores como Jean Luc Gregré, Richard Letoní, Antonio Taringa...
DOCTORA Pero sólo me cita a sicólogos hombres... ¿no será que esa historia de la rivalidad femenina se la han inventado ustedes como una cortina de humo?
INTELECTUAL ¿Cortina de humo?
DOCTORA Porque a lo largo de la historia los más peleones y rivales siempre han sido ustedes, los varones... La guerra es un invento masculino.
EFECTO TELÉFONO
DOCTORA Me gustaría oír otras opiniones... ¿aló?
HOMBRE Sí, doctora, le habla un fiel oyente de su consultorio...
DOCTORA Pues le agradezco, porque hoy en día la fidelidad sólo se ve en los equipos de sonido...
HOMBRE Pero, doctora, yo creo que ese licenciado que acaba de llamar tiene todita la razón. La mujer es una loba para las otras mujeres.
DOCTORA ¿Y los hombres no son lobos para los otros hombres?
HOMBRE No es lo mismo, doctora. Mire, si una mujer tiene a otra mujer como jefa... ya la está despellejando, metiendo chismes... Pero a esa mujer la pone usted bajo el mando de un hombre, y ella lo respetará.
DOCTORA Primero, esperemos que el jefe la respete a ella...
HOMBRE No todos los jefes son acosadores.
DOCTORA Ni todas las mujeres son como usted las pinta, que sólo se portan bien si un hombre las manda.
HOMBRE Otro ejemplo, doctora. Las mujeres peleando por el macho. Se agarran de los pelos, se insultan, se escupen...
DOCTORA ¿Y los machos peleando por la hembra? ¿Cómo se tratan, eh? Peor, porque se matan entre ellos.
HOMBRE Está bien, doctora, pero... Piense usted en la moda... Lo que decía el licenciado... Las mujeres no se arreglan para el marido, sino para competir con otras mujeres...
DOCTORA Pues mire usted, y se lo digo como mujer, yo no me arreglo para el marido ni para las otras mujeres, sino para mí misma, para sentirme contenta conmigo misma...
HOMBRE Caramba, doctora, no hay quién pueda con usted...
DOCTORA No es eso, mi amigo, sino que yo pienso que cargamos un montón de prejuicios... Que las mujeres somos chismosas... vanidosas... que nos sacamos los ojos... ¿Y los hombres? Los seres humanos, hombres y mujeres, somos envidiosos. Y esa envidia es por la baja autoestima. Si te estás comparando siempre con otros, es porque no te quieres a ti mismo. Acepta que siempre habrá otras personas con más talento, o más hermosas, o más simpáticas que tú. ¿Y qué? En lugar de estar envidiando, busca mejorar tus propias capacidades. Vamos a cambiar rivalidad por solidaridad. ¡Hasta la próxima, amigas y amigos!