Los indígenas americanos de la helada provincia de Labrador ya sabían que el frío conserva los alimentos: congelaban de inmediato los peces que capturaban en el invierno, y cuando meses más tarde los descongelaban, estaban frescos para su consumo.
El biólogo Clarence Birdseye observó esto entre 1912 y 1915, y en 1923 fundó una compañía que producía alimentos congelados al instante.
La congelación mantiene bajo control los microorganismos y enzimas que deterioran los alimentos.
Casi todo proceso químico de los seres vivos disminuye a temperaturas inferiores al punto de congelación del agua.
A 10°C, pocos organismos pueden funcionar: hongos, bacterias y microbios que deterioran la comida no pueden reproducirse.
La congelación altera el sabor; sin embargo, el procedimiento criogénico conserva el sabor de carnes, mariscos y panes mejor que los métodos tradicionales.
COLABORACIÓN: Este audio fue grabado en los estudios del promotor cultural Pedro Hurtado en Sabaneta de Barinas con la participación del siguiente elenco:
VOZ: Hermes Varillas Labrador.
EDICIÓN Y MONTAJE: Hermes Varillas Labrador.
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