Toma su nombre de una danza tradicional de los indígenas guahíbos, población aborigen del oriente colombiano.
Desde su fundación, Alé Kumá se ha convertido en uno de los espacios para el encuentro de músicos tradicionales más importante de los últimos años en Colombia.
En el formato que presenta el grupo Alé Kumá, los cantos tradicionales son acompañados por la guitarra, el saxofón, el piano y el contrabajo, junto con la marimba, la gaita y percusión típica.
La sonoridad del grupo es el resultado de un criterio colectivo, donde la experiencia particular de cada uno de los integrantes, hace su aporte en la construcción de los arreglos.
En el año 2002, publicó su primer álbum titulado “Cantaoras”, junto a Etelvina Maldonado, Martina Camargo, Gloria Perea y Benigna Solís.
Este trabajo recibió un Disco de Oro por las ventas realizadas, y se convirtió en la primera producción folclórica en recibir un galardón de estas características en Colombia.
Y es lo que estamos escuchando hoy.
Las voces de estas mujeres representan la cultura de las costas Pacífica y Caribe de Colombia.
Estas mujeres son conocidas como “Cantaoras” (mujeres que al cantar oran) o “Cantadoras” (mujeres que al cantar adoran).
Se caracterizan por crear sus propias canciones que narran historias de su entorno o de su vida misma.
Son mujeres que aprendieron el canto como una tradición de su cultura, lo que les permite realizarlo junto con otras tareas como la maternidad y la vida en comunidad.
La mayoría de estas mujeres proviene de zonas afectadas por la violencia en el país, por lo que su música se ha convertido en una expresión que busca la paz y el equilibrio entre los seres humanos.
Aunque estas exponentes del folclore ancestral existen desde hace varias generaciones, solo unas pocas han logrado darse a conocer.
Entre las reconocidas mundialmente, mencionamos a Totó la Momposina y Petrona Martínez.
El disco escuchado hoy, CANTAORAS, fue lanzado por Alé Kumá en 2002.
Dedicamos el presente programa al viejo muñeco con alma, que cruza las horas sin sol y sin suerte.