Le hizo caer en profundo sueño y tomó una de sus costillas e hizo el cuerpo humano de una mujer, y la trajo al hombre, Génesis capítulo 2, versículos 18, 21 y 22. Entonces, Adán, dijo: «¡Esta sí que es hueso de mis huesos y carne de mi carne! Será llamada “Mujer”, porque del hombre fue tomada».
Ese relato de la Biblia sobre la creación de la mujer como ser viviente semejante al varón, fue interpretada equivocadamente: como un ser inferior o con menos derechos que el hombre, pues ella es hueso de sus huesos y carne de su carne. Así representó el primer motivo de la postergación de la mujer en la iglesia y en el mundo, opina la dirigente de la Unión de Mujeres Aymaras (Uma) Elizenda Morales Cruz.
Las Santas Escrituras también condenan a la mujer como traedora del pecado y destructora del Paraíso Terrenal donde vivían con Adán, al haber sido tentada por Satanás para comer la manzana: el fruto prohibido del Edén; por tanto es el segundo motivo para que la mujer no es admitida en el sacerdocio. Al respeto, Mirtha Frisancho Atencio del Centro de Apoyo al Desarrollo de la Mujer y del Niño (CEADMUN Puno), considera.
En el evangelio de Juan, capítulo 8: los fariseos llevan a una mujer que había sido descubierta cometiendo adulterio y según la ley de Moisés había que matarla apedreándola, y como los fariseos eran tan machistas dejaron que el hombre se escapara y sólo llevaron a la mujer, y Jesús no lo condenó. Entonces vemos que la historia de la humanidad la mujer siempre ha sido marginada hasta en el tiempo de Jesús, afirma la dirigenta de la Femucarinap en la región Puno, Rosa Cachi, quién ruega al Papa Francisco el nombramiento de sacerdotisas u obispas; porque las mujeres y varones tienen iguales derechos.
Como escuchando el clamor de las mujeres del mundo, el Papa Francisco, Jorge Bergoglio, dijo que el papel de la Virgen María es más importante que el de cualquier obispo o apóstol. Señaló que la Iglesia es femenina desde su origen y que, por tanto, el papel de las mujeres en ella debería ser mayor. “Las mujeres deben tener una gran presencia en las áreas de toma de decisiones de la Iglesia”.
La iglesia debe ser como un fermento para ayudar a cambiar el mundo, pero se ha convertido en repetidora de las acciones de los gobiernos del mundo, se ha enlodado y hasta fracasado, por so la iglesia como institución tiene deudas, y una de esas deudas es frente a la mujer, sostiene el Padre Luis Sambrano de la Parroquia Pueblo de Dios de Juliaca, quien sostiene que con el tiempo habrá mujeres que accedan al sacerdocio, y al diaconado; porque después de las Cismas en la Iglesia Católica: la Iglesia Luterana y Viejos Católicos, ya tienen sacerdotisas y obispas.
Como ha escrito Phyllis Zagano, de la Universidad de Loyola de Chicago, la mayor experta de la Iglesia en este tema: “El diaconado femenino no es una idea para el futuro. Es un tema de presente, para hoy”. Y cuenta que al Papa Benedicto XVI se le quedó en el tintero, pero el papa Francisco podría acelerar el proceso. Ya hoy, la Iglesia Apostólica Armenia y la Ortodoxa Griega, ambas unidas a Roma, cuentan con diaconisas. ¿Y usted aceptará que una sacerdotisa dirija la misa? Hay mucho camino por recorrer, pero, como dice el hermano Luis Sambrano muy pronto tendremos sacerdotisas y obispas.
Pachamama Radio, la voz del sur andino
Grober Cutipa
Es justicia sencilla de postergación eterna. No hay que suplicar sino soportar las humillaciones.Hay otras viejísimas así.