Efecto: Cortina musical "Sabana" de Simón Díaz
Los cantos de trabajo son tan viejos como los pueblos y territorios donde los hombres con su sudor forjan a diario la supervivencia, progreso y porvenir de los pueblos. Estos cantos además de ser un rito laboral, simbolizan el espíritu de convivencia entre quienes se hermanan en comunes faenas, tan poco valoradas por las sociedades tecnificadas y de consumo. Así pues, la tonada llanera es un canto de trabajo que acompaña a diversas faenas como el ordeño o el arreo y es el necesario descanso del hombre de a caballo o a pie enjuto en su mundana existencia. Más específicamente, la tonada llanera es una manera muy particular de lograr una común unión del hombre con los animales a quienes domestica y va conduciendo con su dejo de tristeza expresado en un canto que es un diálogo de un cantador muy espontáneo ofreciendo sus secretos a sus eternos compañeros, los animales, que en el arreo o en el ordeño muestran instintos de mansedumbre atendiendo y obedeciendo a cantos muy particulares para ellos ya familiarizados por una rutina amenizada incluso con pretensiones a humanizar mediante la metáfora ese instinto animal. Es así como el mismo Simón confiesa y nos cuenta acerca de esta complicidad entre el llanero y sus reses que peligrosamente se ve amenazada con la tecnología: "Esta tonada se nutre de la faena del canto de ordeño y del canto de arreo de ganado. A mediados de los años 50 yo me entero que la tonada estaba peligrosamente amenazada a desaparecer, por cuanto para esa época, Venezuela consumía aproximadamente 4 millones de litros de leche diarios, bien en el cafecito con leche, el arroz con leche, la leche pa´ los muchachos, la leche pa´ los viejitos, la industria láctea, el queso, etc. Y solamente producíamos 2 millones, nos faltaban 2 millones de litros, entonces para cubrir nuestro consumo ¿Qué haríamos?. Teníamos que producir otros 2 millones más diariamente. La idea era mecanizar las fincas lecheras porque ordeñando a mano no íbamos nunca a lograr aumentar la productividad que deseábamos y cuando ya tuviéramos todas las fincas lecheras mecanizadas, entonces no iba a haber hombrecito que se levantara a las cuatro de la mañana a ordeñar una cuenta de vacas y como el ordeño y el arreo son la materia de donde se nutre la tonada, me dije, no vamos a tener tonada llanera. Y por eso fue que me dediqué a buscarla y componerla para ayudar y dejarle un aire musical a Venezuela. Que para entonces no tenía bien definido. Hoy día, podemos asegurar que en el repertorio de los mejores cantantes estará un aire musical netamente venezolano: la tonada llanera" Estos cantos son mesurables e intercalan gritos y jipíos de acuerdo con la necesidad de la labor, según se trate del ordeño o del arreo, por ejemplo:
Efecto: Ajila, ajila novillo, por la huella del cabestrero, jo, jooo, jojojoooo" (canto de Simón)".
El anterior audio como una contribución hacia el rescate y promoción de nuestras tradiciones y nuestro acervo cultural de su radio revista FORMANDO CIUDADANÍA y esta Emisora
COLABORACIÓN: Este audio fue grabado en los estudios de "La Voz de Libertad" 106.3 F. M. con la participación del siguiente elenco:
VOZ: Hermes Varillas Labrador.
EDICIÓN Y MONTAJE: Hanmar Falcón y Saymon El Junior
PARA SUS E-MAILS: formandociudadania@gmail.com
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FORMANDO CIUDADANÍA, un programa cultural y educativo con responsabilidad social en la formación e información para con nuestros usuarios y usuarias. Por lavozdelibertad.com, lavozdesabaneta.com y lavozdesantaines.com de martes a viernes, de 10 a 11 de la mañana, hora venezolana. Los medios de comunicación concientes en la consigna "TODA LA PATRIA UNA ESCUELA"
Los cantos de trabajo son tan viejos como los pueblos y territorios donde los hombres con su sudor forjan a diario la supervivencia, progreso y porvenir de los pueblos. Estos cantos además de ser un rito laboral, simbolizan el espíritu de convivencia entre quienes se hermanan en comunes faenas, tan poco valoradas por las sociedades tecnificadas y de consumo. Así pues, la tonada llanera es un canto de trabajo que acompaña a diversas faenas como el ordeño o el arreo y es el necesario descanso del hombre de a caballo o a pie enjuto en su mundana existencia. Más específicamente, la tonada llanera es una manera muy particular de lograr una común unión del hombre con los animales a quienes domestica y va conduciendo con su dejo de tristeza expresado en un canto que es un diálogo de un cantador muy espontáneo ofreciendo sus secretos a sus eternos compañeros, los animales, que en el arreo o en el ordeño muestran instintos de mansedumbre atendiendo y obedeciendo a cantos muy particulares para ellos ya familiarizados por una rutina amenizada incluso con pretensiones a humanizar mediante la metáfora ese instinto animal. Es así como el mismo Simón confiesa y nos cuenta acerca de esta complicidad entre el llanero y sus reses que peligrosamente se ve amenazada con la tecnología: "Esta tonada se nutre de la faena del canto de ordeño y del canto de arreo de ganado. A mediados de los años 50 yo me entero que la tonada estaba peligrosamente amenazada a desaparecer, por cuanto para esa época, Venezuela consumía aproximadamente 4 millones de litros de leche diarios, bien en el cafecito con leche, el arroz con leche, la leche pa´ los muchachos, la leche pa´ los viejitos, la industria láctea, el queso, etc. Y solamente producíamos 2 millones, nos faltaban 2 millones de litros, entonces para cubrir nuestro consumo ¿Qué haríamos?. Teníamos que producir otros 2 millones más diariamente. La idea era mecanizar las fincas lecheras porque ordeñando a mano no íbamos nunca a lograr aumentar la productividad que deseábamos y cuando ya tuviéramos todas las fincas lecheras mecanizadas, entonces no iba a haber hombrecito que se levantara a las cuatro de la mañana a ordeñar una cuenta de vacas y como el ordeño y el arreo son la materia de donde se nutre la tonada, me dije, no vamos a tener tonada llanera. Y por eso fue que me dediqué a buscarla y componerla para ayudar y dejarle un aire musical a Venezuela. Que para entonces no tenía bien definido. Hoy día, podemos asegurar que en el repertorio de los mejores cantantes estará un aire musical netamente venezolano: la tonada llanera" Estos cantos son mesurables e intercalan gritos y jipíos de acuerdo con la necesidad de la labor, según se trate del ordeño o del arreo, por ejemplo:
Efecto: Ajila, ajila novillo, por la huella del cabestrero, jo, jooo, jojojoooo" (canto de Simón)".
El anterior audio como una contribución hacia el rescate y promoción de nuestras tradiciones y nuestro acervo cultural de su radio revista FORMANDO CIUDADANÍA y esta Emisora
COLABORACIÓN: Este audio fue grabado en los estudios de "La Voz de Libertad" 106.3 F. M. con la participación del siguiente elenco:
VOZ: Hermes Varillas Labrador.
EDICIÓN Y MONTAJE: Hanmar Falcón y Saymon El Junior
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