Tres universidades nacional (de Córdoba, Río Cuarto y Católica) cuestionaron la instalación de Monsanto. Denunciaron el permiso de la obra sin la previa evaluación de impacto ambiental, como establece la Ley General del Ambiente (25.675), y que tampoco se cumplió con las audiencias públicas. Las tres universidades nacionales explicitaron la vigencia del “principio precautorio” (cuando haya riesgo de afectar el ambiente y la salud, se deben tomar medidas protectoras que pueden provocar esa afectación).
El 19 de septiembre de 2013 se organizó el festival “Primavera sin Monsanto”. Fue también el momento elegido para bloquear por tiempo indeterminado el portón de ingreso al predio. Monsanto envió cartas documento a Sofía Gatica (de Madres de Ituzaingó) y a Eduardo Quispe, de la Asamblea. Los acusó de “lesionar la seguridad pública”, de “usurpación” y amenazó con una denuncia penal.
Sobrevinieron seis represiones (con más de veinte heridos, siempre vecinos), ejecutadas por la policía provincial, punteros políticos y patotas de la Uocra.
Lucas Vaca, de la Asamblea, hace un balance positivo de los dos años de bloqueo, aunque reconoció que fueron (y son) “años duros”. Explicó que no estaban acostumbrados a marchas, denuncias y represiones, pero advirtió que seguirán adelante y no permitirán la instalación de Monsanto. “No queremos criminalización, ni represiones, ni muertos, pero estaremos hasta el final, defendiendo el lugar donde vivimos”, afirmó.
El 8 enero de 2014, la Sala II de la Cámara del Trabajo detuvo la construcción de la planta solicitada en un amparo de la Asamblea. El fallo declaró la arbitrariedad y la inconstitucionalidad de las ordenanzas emitidas por la Municipalidad y la Provincia que habían posibilitado el inicio de la obra. El 10 de febrero de 2014, la Secretaría de Ambiente provincial rechazó el estudio de impacto ambiental de Monsanto por grandes carencias técnicas. Entre ellos, no mencionaba cómo se tratarían las toneladas de desechos ni el gran consumo de agua.
El último mes, Monsanto dejó trascender que presentará un nuevo estudio de impacto ambiental. Cambió su cúpula gerencial en Argentina y planea construir su planta en 2016.
La discusión sobre Monsanto potenció denuncias sobre el uso masivo de agroquímicos, desmontes, sequías y especulación inmobiliaria. En Río Cuarto (donde Monsanto planeaba instalar una planta experimental), la acción de organizaciones sociales y la UNRC motivaron los cuestionamientos. El intendente, Juan Jure, prohibió por decreto la instalación de Monsanto.
Sofía Gatica denunció que “el Gobierno negoció la salud del pueblo y avala un nuevo estudio de impacto ambiental”, pero avisó que no permitirán la llegada de Monsanto: “El pueblo ya dijo que no. Luchamos por la salud y la vida de la población”.
FUENTE
TIERRA ARRASADA DE DARÍO ARANDA
EL DOCUMENTAL EL MUNDO SEGÚN MONSANTO
http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-282008-2015-09-19.html