Hoy jueves 19 de Abril del 2018 vuelven a haber multitudinarias manifestaciones estudiantiles en todo Chile. Miles y miles de estudiantes secundarixs, universitarixs, profesores y la ciudadanía conciente vuelven a salir a las calles de Concepción, Santiago, Temuco, y a nivel nacional, con la consigna de "Chile ya decidió". http://www.biobiochile.cl/noticias/nacional/chile/2018/04/19/estudiantes-realizan-hoy-primera-gran-marcha-de-2018-y-del-segundo-gobierno-de-pinera.shtml Ésto debido a que el Tribunal Constitucional, en los primeros días del mandato del derechista S. Piñera, ha modificado la constitución (artículo 63) para restablecer el lucro en la educación. Desde hace más de doce años que el pueblo de Chile exige recuperar una educación pública, gratuita y de calidad, la cual le fue arrebatada por la dictadura de Pinochet en sus privatizaciones neo-liberales. El mandato del soberano se ha expresado con fuerza con manifestaciones estudiantiles desde el año 2006 (pinguinazo), alcanzando su apogeo en el período de intensas manifestaciones los años 2010-2011, en donde contaban con el apoyo de más de un 80% de la opinión pública. Convirtiéndose en la madre de todas las batallas de la política chilena, tanto que tuvo que ser recogida por el segundo gobierno de M. Bachelet, tras la polarización de la sociedad y el clima de conflictividad social con que cerró su primer mal gobierno el recién reelecto presidente. Bachelet implementó en los últimos años una reforma educacional, ofreciendo de hecho gratuidad al pagar el Estado los altísimos precios de las mensualidades para los quintiles de menores recursos, dejando así intacta la de propiedad de los establecimientos, llegándose a un ambiguo modelo en que los fondos públicos financian directamente a los privados. Esta reforma, aunque insuficiente, peligra hoy de ser retrotraída, e incluso el artículo modificado, que prohíbe explícitamente el lucro en la educación, data de la misma constitución dictatorial de 1980. Es decir que con ésto la derecha demuestra estar dispuesta a ir más allá, para consagrar su negocio con la educación chilena. Lxs estudiantes también demuestran estar dispuestxs a ir más allá, y a las demandas históricas añaden la de una educación no sexista y no capitalista.