que por las noches
en que los grillos cantan y la luna llena asoma
antes que caiga el sol
suelen encontrarse a orillas de río, cerca del bañado
una mujer con el cabello rubio y largo hasta la espalda
y un hombre,
para amarse toda la noche
como hacían hace doscientos años atrás.
Al indio lo mataron los gringos, por la espalda, una noche de esas
por haber amado a una mujer blanca,
ella huyo y tuvo a su hijo, que lo llamo Tucho,
que quiere decir en la lengua indígena; el de los ojos claros
el cual fue el fundador de este pueblo.
Dicen por acá
que quien pueda esperarlos por las noches
.y tenga el valor suficiente para acariciarlos en pleno amor
se desgarrará en su felicidad y nacerá en su muerte
Pero amara eternamente a su mujer deseada
Desde esa orilla del río te escribo.
Hoy es una de esas noches.
Ahí vienen. Voy a acariciarlos