MARÍA Gracias, Juan Luis, el mejor periodista... bueno, el único que conozco.
PERIODISTA Y frente a frente, el apóstol Pablo. Usted fue un hombre estudiado, Pablo. Manejó varios idiomas y dedicó años y años a los libros.
PABLO Siendo yo muy joven mis padres me enviaron a Jerusalén a estudiar las sagradas escrituras.
PERIODISTA Entiendo que lo enviaron a la mejor escuela de entonces.
PABLO Así es. Yo estudié a los pies del famoso Gamaliel, célebre fariseo, doctor de la Ley y miembro del Sanedrín.
MARÍA Tal vez le quedó alguna tierrita de esos pies, don Pablo...
PABLO ¿Cómo dice, mujer?
MARÍA Que fue el Sanedrín el que condenó a muerte a Jesús.
PABLO Cuando eso sucedió, yo todavía no había conocido a Cristo, el Señor, bendito sea su Nombre.
PERIODISTA Y cuéntenos, Pablo, ¿qué aprendió en la escuela de Gamaliel?
PABLO Aprendí las escrituras de memoria. Aprendí los mandamientos que todo buen judío debe cumplir. Los vicios que todo buen judío debe evitar. La recta moral.
PERIODISTA En varias de sus cartas aparecen las listas de esos vicios… Le pediré a Magaly que nos lea algunas...
MAGALY Con gusto, Juan Luis. A los corintios Pablo les previene sobre envidias, divisiones, murmuraciones, soberbia, inmundicias, fornicación y lascivia. A los romanos les advierte sobre toda clase de perversidad y depravación, homicidios, chismes, calumnias, rebelión contra los padres, glotonerías, borracheras y lujurias. A los efesios, les habla de enojo, ira, gritería y maledicencia. A los colosenses de fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y palabras deshonestas.
MARÍA Moisés ordenó diez mandamientos, y usted, don Pablo, los multiplicó.
PABLO Son las leyes de Dios que regulan una vida santa. ¡Gracia y paz!
PERIODISTA ¿Usted qué piensa, María Magdalena?
MARÍA Más pecados que pescados. No sé de dónde habrá sacado don Pablo esas ristras de vicios. ¡Son más que los peces que cabían en las redes del lago de Galilea.
PABLO No se engañe, mujer. Por esos desafueros de la carne es que la ira de Dios se descarga sobre los hijos de la desobediencia.
MARÍA Pues si le cuento de nuestros desaforados... Salomé, la mamá de Santiago y Juan, una enredadora y chismosa, quería poner a sus hijos en los primeros puestos... Más glotón que Natanael no conocí... Y Mateo que vivía borrachito...
PERIODISTA ¿Nos está hablando del grupo de Jesucristo?
MARÍA Sí, claro. Y de palabras deshonestas, oiga, todos esos pescadores de Cafarnaúm soltaban más palabrotas que cuando te das un canillazo con la piedra de ángulo... Gritones, Pedro el primero... Y alguno también andaba pellizcando a las hermanas... Bueno, la vida es así... Jesús no se fijaba mucho en eso...
PERIODISTA Elena Martínez, nuestra reportera, nos ha preparado una nota sobre esa moral cristiana a la que se refiere el apóstol Pablo....
ELENA Gracias, Juan Luis. Voy a hacer un recorrido por algunas iglesias y cultos que se consideran seguidores de Jesús para conocer sus costumbres y sus criterios morales... Buenos días, estamos haciendo una encuesta en Cochabamba, Bolivia. Queremos saber si los miembros de su comunidad pueden tomar vino, licor... o lo tienen prohibido.
PASTOR Prohibidísimo. Ni una gota, señorita. Como ordenó Jesucristo, los borrachos no entrarán en el Reino de los Cielos.
ELENA ¿Tampoco cerveza…?
PASTOR Nada, nada de alcohol. ¡Mire cómo acabó Noé bajo la parra!
ELENA Buenos días, una encuesta de Emisoras Latinas. ¿Los miembros de su iglesia pueden bailar, van a discotecas?
MUJER ¿Qué dice usted? El Señor Jesús rechazaba esas abominaciones.
ELENA ¿Y el vestido?
MUJER Con modestia. Nada de escotes ni de faldas cortas. El cuerpo es tentación. No hay que andar mostrándolo.
ELENA También logramos entrar en un convento. Hermana, esta casa es de clausura, ¿no?
MONJA Lo es.
ELENA Ustedes no salen a la calle y hacen voto de silencio. Han renunciado a hablar. ¿Por qué hacen esto?
MONJA Así completamos en nosotras lo que falta a la pasión de Cristo...
ELENA ¿No es un gran sacrificio?
MONJA Lo es. Imitamos a Jesucristo. Para sufrir por él y con él... Como enseñó san Pablo, traemos siempre en nuestro cuerpo las marcas del Señor Jesús.
ELENA Para Emisoras Latinas, reportó Elena Martínez.
PERIODISTA Gracias, Elena.
MARÍA Oyendo a esos hermanos me parece estar oyéndolo a usted, don Pablo.
PABLO Pues me alegro. Han seguido mis consejos para alcanzar una vida santa e irreprochable a los ojos de Dios.
MARÍA Usted lo ha dicho. Sus consejos. Porque no son los de Jesús.
PABLO ¿Qué quiere decir usted, mujer?
MARÍA Yo quiero decir que Jesús tomaba vino y bailaba en las fiestas y le encantaba hablar... mira a esas pobres mujeres que ni hablar pueden...
PERIODISTA ¿A usted no le gustaba el vino, apóstol Pablo?
PABLO Con moderación. Le recomendé a Timoteo que tomara un poco por sus enfermedades.
PERIODISTA Magaly me recuerda un pasaje de su carta a los corintios donde dice: Les escribí que no se junten con ninguno que sea fornicario, o borracho, o ladrón. Con los viciosos, ni sentarse a la misma mesa.
MARÍA ¡Ay, don Pablo, pues Jesús hizo lo contrario! Todavía me acuerdo cuando fuimos a comer en casa de Mateo, el publicano. ¡Y cómo se puso el rabino! Le salía espuma por la boca...
RABINO ¿Cómo te atreves a partir el pan con los pecadores? Todo Cafarnaúm está murmurando de ti, forastero.
JESÚS ¿Ah, sí? Pues que sigan gastando saliva, si quieren.
RABNO No puedes sentarte a la mesa con un hombre que está manchado.
JESÚS ¿Y quién me lo prohíbe?
RABINO La Ley santa de Moisés y las santas costumbres de nuestro pueblo. ¿No sabes que el que se junta con un hombre impuro se vuelve impuro igual que él?
JESÚS Oye, rabino, y tú, estás limpio?
RABINO ¿Cómo dices?
JESÚS Digo que si tú estás limpio. Has levantado el dedo contra Mateo. Ten cuidado Dios no levante su dedo contra ti.
MARÍA Jesús comía con todos, con prostitutas, con cualquier sinvergüenza... Un día, en Jericó, se encontró con Zaqueo, un hombre bajito, bastante ladrón, y no hizo ascos de entrar a comer en su casa... Por eso, les caía tan mal a los doctores y fariseos... Imagínese que a Jesús lo llamaban comilón y borracho.
PERIODISTA ¿A Jesucristo lo llamaban así?
MARÍA Sí, pero él no hacía caso. Se reía. Jesús se reía mucho. Nunca, nunca nos dijo que hiciéramos ayunos ni penitencias ni oraciones largas…
PERIODISTA En sus listas de vicios, apóstol Pablo, veo una preocupación especial por los pecados sexuales... Díganos, María Magdalena, ¿a Jesús le preocupaban mucho, usted que lo conoció tan de cerca?
MARÍA Cuando unos vecinos y fariseos arrastraron a una mujer que estaba con otro hombre para matarla a pedradas... ¿Usted estaba ahí, don Pablo?
PABLO No, no sé de qué me habla...
MARÍA Algunos amigos suyos fariseos sí estaban en el molote con las piedras listas... Jesús les dijo: Quien esté libre de pecado que le tire la primera piedra. Él no condenaba a nadie por esos asuntos.
PERIODISTA Tenemos una llamada... ¿Aló?
CASTILLO Aquí José María Castillo, fiel oyente de su programa...
PERIODISTA Pues la bienvenida a nuestro teólogo amigo...
PABLO ¡Llamó el que faltaba!
CASTILLO Yo me preguntaba, cuando escuchaba las listas de pecados que san Pablo pone en sus cartas, si él las habrá recibido de su maestro Gamaliel... Porque reflejan perfectamente el moralismo de los fariseos.
PERIODISTA ¿Qué dice usted, apóstol Pablo?
PABLO No tengo nada que decirle a alguien que no da la cara.
PERIODISTA Son avances tecnológicos, apóstol Pablo. El teléfono consiste... bah, se lo explico después. Continúe, Castillo.
CASTILLO Pablo fue un moralista. Jesús no. Para Jesús el Reino de Dios era ante todo remediar el sufrimiento humano, la felicidad en esta vida. Y para Pablo era la superación de los vicios para poder alcanzar la otra vida. La ética de Jesús y la ética de Pablo son totalmente opuestas.
PERIODISTA María Magdalena, usted que estuvo a su lado tanto tiempo... ¿qué le preocupaba a Jesús?
MARÍA Lo que él anunció en Galilea, que los pobres dejen de ser pobres, que los enfermos sanen, que los hambrientos tengan que comer...
PERIODISTA ¿Y a Pablo qué le preocupaba? Díganos, Castillo.
CASTILLO A Pablo, como puede leerse en sus cartas, lo que más le preocupaba eran los vicios y los pecados. El Dios de Pablo odia el pecado, el Dios de Jesús ama al pecador.
PERIODISTA Las personas que hablaron en el reportaje se sacrificaban para imitar a Jesús…
MARÍA Qué equivocados, qué vidas desperdiciadas... Yo digo que no siguen a Jesús, siguen a Pablo.
CASTILLO El Dios que usted nos presenta, Pablo, es un Dios que exige sufrimiento y sacrificios para perdonar. El Dios que nos presenta Jesús es un Dios que manda el sol y la lluvia sobre buenos y malos, el padre que acoge al hijo extraviado, el Dios de la alegría en el gran banquete al que entran hasta los vagabundos de todos los caminos de la vida.
PABLO ¿Qué zafiedad dice usted? Usted es un... ¡un emisario de Satanás!
CASTILLO No puedo ser emisario de lo que no existe.
MARÍA Yo pienso que los satanases son los fariseos que atan cargas pesadas sobre las espaldas de la gente, pero ellos ni con un dedo quieren moverlas.
PABLO Ya sé yo el pecado que se me olvidó en mis listas: ¡la impertinencia!
PERIODISTA Tranquilidad. Tranquilidad que todavía tenemos mucho para conversar. Y ahora llegamos al final de nuestra trasmisión. Pueden encontrarnos en la web y en las redes sociales: www.emisoraslatinas.net Hasta la próxima! Y recuerden: quien tiene preguntas, piensa; quien sólo tiene respuestas, obedece. Estuvo con ustedes, Juan Luis.